Por si fuera poca su desesperación, familiares acudieron a buscarla en la FGE en Culiacán y les piden ir a levantar una denuncia por desaparición hasta el puerto de Mazatlán

Guasave, Sinaloa. Alma Clarissa de 22 años estaba realizando sus prácticas profesionales en la ciudad de Guadalajara desde hace siete meses, la noche del lunes abordó el camión 502 de la línea GBT Norte de Sinaloa, venía de “raite”, no compró boleto, por eso no está en la lista de pasajeros, pero no aparece.
Familiares de la joven profesionista se comunicaron a Línea Directa para pedir ayuda y dar con el paradero de la joven de Juan José Ríos que adelantó su viaje de fin de semana para ver a un familiar que se encuentra hospitalizado, la última ubicación su celular la arroja en el mismo lugar en donde ocurrió el accidente de este martes por la madrugada en el tramo de Mazatlán–Culiacán de la maxipista.
“Iba a venir para el puente, pero nos salió una emergencia y se vino, anoche se vino, la hora de la videollamada fue como a las 8:00 de la noche y su novio se comunicó con ella por última vez como a la 1 de la madrugada. Nuestros teléfonos están vinculados y la ubica a las 4:00 de la mañana en el lugar del accidente, el teléfono indica la última ubicación ahí en el accidente, ahí se apagó el teléfono. Ahorita estamos en la Fiscalía de Culiacán esperando a que nos den información, no nos quieren dar información. Estamos esperando a que lleguen con los cuerpos, pero nos dicen que hay que levantar un reporte de desaparición hasta Mazatlán, que se tiene que levantar el acta allá en Mazatlán”, lamentó la tía de Alma Clarissa, quien cuestionó que ya de por sí la desesperación que tienen es fuerte y estos trámites tortuosos los tienen a bordo del colapso.
Clarissa estuvo en Los Mochis en las fiestas decembrinas y se regresó a Guadalajara para seguir con sus prácticas profesionales, ella abordó el 502 de la línea GBT sin pagar boleto porque su familia es conocida del dueño del autobús Norte de Sinaloa que ardió en llamas la madrugada de este martes.
La familia no tiene ni idea en qué asiento venía la joven de 22 años, pues cuando viajaba por hacerle el favor la ubicaban en donde no estuviese ocupado, el último mensaje que envió fue a su novio poco antes de la 1:00 de la madrugada preguntando cómo estaba la salud del familiar al que venía a ver.

FUENTE: Portal Línea Directa