Lo que debía ser una jornada de juegos y convivencia familiar terminó en un susto mayúsculo cuando un castillo inflable se elevó varios metros con dos niños en su interior durante el Protea Fees, el festival anual de la escuela primaria Protearif Laerskool.
Según relataron testigos al diario sudafricano The Citizen, una ráfaga de viento repentina levantó la estructura —que aparentemente no estaba correctamente anclada— hasta la altura de un edificio de dos o tres pisos. El ascenso quedó grabado en vídeo por uno de los asistentes, quien señaló que mientras otras atracciones inflables sí parecían estar aseguradas, el castillo involucrado “no estaba atado al suelo de ninguna manera”.
Un castillo inflable se elevó varios metros con dos niños en su interior durante el Protea Fees, el festival anual de la escuela primaria de #Krugersdorp, #Sudáfrica. Una ráfaga de viento repentina levantó la estructura que aparentemente no estaba correctamente anclada hasta la
Los dos menores fueron expulsados del hinchable durante el ascenso y sufrieron lesiones de consideración: uno presentó una fractura de cráneo y el otro una fractura de brazo, de acuerdo con los primeros reportes médicos. Ambos niños recibieron atención de urgencia y, tras varios días de observación, fueron dados de alta el sábado 31 de mayo y el martes 3 de junio, respectivamente.
El centro educativo reaccionó el mismo 31 de mayo con un mensaje en su página de Facebook que tranquilizaba a la comunidad: “Con gran gratitud, los dos niños que estuvieron en el accidente están estables. Gracias a todos los que actuaron tan rápido ante lo imprevisto”.
Tres días después, el 3 de junio, la escuela confirmó el alta hospitalaria de ambos alumnos y agradeció el apoyo recibido: “¡Qué privilegio que la Escuela Primaria Protearif pueda confiar en que nuestros padres y la comunidad de Krugersdorp estén unidos!”.
Pese al susto, el festival continuó su programación tras el incidente. Las autoridades escolares no han anunciado por ahora cambios en los protocolos de seguridad, pero la empresa especializada y varios padres reclaman una revisión exhaustiva de las medidas de anclaje antes de futuros eventos.
