El gobierno de Israel confirmó este lunes que interceptó y desvió hacia sus costas un barco civil con destino a Gaza, que transportaba a un grupo de activistas pro palestinos con ayuda humanitaria. La embarcación, llamada Madleen, formaba parte de una nueva misión impulsada por la Coalición de la Flotilla de la Libertad (Fredom Flotilla) y zarpó de Sicilia, Italia, el 1 de junio. Entre los 12 pasajeros se encontraba la activista ambiental sueca Greta Thunberg y la eurodiputada Rima Hassan, miembro del Parlamento Europeo.
La interceptación ocurrió luego de que las autoridades israelíes advirtieran que impedirían el arribo del barco al enclave costero, bajo el argumento de que se trataba de una violación del bloqueo naval impuesto desde 2007. El ministro de Defensa, Israel Katz, declaró el domingo que había instruido al ejército para impedir por cualquier vía la llegada del Madleen, y lanzó duras acusaciones contra Thunberg, a quien calificó de “antisemita” y de ser una “propagandista de Hamás”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel describió la embarcación como un “yate selfi de celebridades” y acusó a sus ocupantes de organizar una “provocación mediática para ganar publicidad”. También publicó videos de los pasajeros con chalecos salvavidas recibiendo agua y sándwiches tras ser interceptados.
Por su parte, la Coalición de la Flotilla denunció que el barco fue rodeado por drones y que posteriormente se perdió contacto con la tripulación. Afirmaron que la interceptación constituye un “secuestro” y recordaron antecedentes como el del Mavi Marmara, en 2010, cuando una incursión militar israelí a una flotilla humanitaria provocó la muerte de nueve activistas.
El Madleen llevaba una carga simbólica de ayuda humanitaria, que incluía leche en polvo, arroz, harina, pañales, suministros médicos y prótesis para niños. Israel minimizó esta carga, calificándola de “ínfima”, equivalente a menos de un camión.
Thunberg, quien en días recientes había expresado su rechazo al bloqueo y a las acciones del gobierno israelí, justificó su participación afirmando que “aunque las probabilidades estén en contra, debemos seguir intentándolo. En el momento en que dejemos de intentarlo es cuando perdemos nuestra humanidad”.
La situación en Gaza continúa siendo crítica tras 20 meses de guerra que comenzaron con el ataque de Hamás en octubre de 2023. Durante ese tiempo, Israel llegó a cerrar el paso de ayuda durante más de 80 días, y aunque recientemente impulsó un nuevo sistema de distribución a través de la Fundación Humanitaria de Gaza, este ha sido rechazado por organizaciones internacionales, que lo acusan de instrumentalizar la ayuda y excluir a organismos como la ONU.
El nuevo sistema también ha enfrentado episodios violentos: en febrero, las fuerzas israelíes dispararon contra civiles que acudían a recoger ayuda en el sur de Gaza, dejando decenas de muertos y heridos. Además, el programa ha sido amenazado por Hamás, según la Fundación.
Esta no es la primera vez que la Flotilla de la Libertad intenta romper el bloqueo por mar. Una misión anterior, llamada “Conscience”, también intentaron llevar llegar a Gaza y fracasó tras ser alcanzada por explosiones frente a la costa de Malta en abril, sin que se reportaran víctimas.
𝗜𝘀𝗿𝗮𝗲𝗹 𝗶𝗻𝘁𝗲𝗿𝗰𝗲𝗽𝘁𝗮 𝗯𝗮𝗿𝗰𝗼 𝗰𝗼𝗻 𝗮𝘆𝘂𝗱𝗮 𝗮 𝗚𝗮𝘇𝗮; 𝘃𝗶𝗮𝗷𝗮𝗯𝗮𝗻 𝗚𝗿𝗲𝘁𝗮 𝗧𝗵𝘂𝗻𝗯𝗲𝗿𝗴 𝘆 𝘂𝗻𝗮 𝗲𝘂𝗿𝗼𝗱𝗶𝗽𝘂𝘁𝗮𝗱𝗮 #Israel interceptó en aguas internacionales al buque Madleen, de la Flotilla de la Libertad, que partió de Sicilia con
