
La conductora Andrea Legarreta ha compartido por primera vez detalles sobre los motivos que llevaron al fin de su matrimonio con el cantante Erik Rubín. Durante una entrevista reciente, la presentadora del programa “Hoy” explicó cómo su relación se fue desgastando con el paso del tiempo, hasta que ambos decidieron separarse por el bienestar de los dos.
Luego de 23 años de matrimonio, Andrea Legarreta y Erik Rubín anunciaron públicamente su ruptura en 2023, generando múltiples especulaciones entre los seguidores de la pareja, que estuvo casada por más de dos décadas. Ahora, casi dos años después, la también actriz se ha sincerado sobre las causas emocionales y cotidianas que afectaron su vínculo sentimental.
Legarreta explicó que uno de los factores principales del distanciamiento fue la rutina. “Es una cosa de dos… cualquier relación, si no la alimentas, llega un punto en el que se vuelve una costumbre”, señaló, haciendo énfasis en que ambas partes tienen responsabilidad en el desgaste de una relación a largo plazo.
¿Cómo fue su relación?
Recordó que su historia de amor con Erik Rubín comenzó de forma intensa y rápida: se hicieron novios, se comprometieron en poco tiempo y contrajeron matrimonio en menos de seis meses. “Yo tenía 28 años y él acababa de cumplir 29”, comentó la conductora, quien describió el inicio de su vida juntos como un periodo lleno de ilusión y cariño.
Con el paso de los años, sin embargo, las dinámicas familiares y laborales comenzaron a tomar protagonismo, desplazando la atención que se daban como pareja. “Yo soy muy mamá, y quiero pensar que eso fue un distractor importante. Él se enfocó mucho en trabajar”, detalló, señalando que aunque funcionaban bien como equipo, la relación de pareja quedó rezagada.
Andrea también destacó que, a pesar de la separación, sigue existiendo un vínculo de respeto y cariño entre ambos. “Nos adoramos, nos admiramos… pero la historia de pareja se fue diluyendo”, expresó con honestidad, sin dramatismos y con un enfoque introspectivo.
Tanto Legarreta como Rubín han manifestado en distintas ocasiones su deseo de mantener una relación cordial y colaborativa, especialmente por el bienestar de sus hijas. Esta reciente declaración confirma que la decisión de separarse fue tomada con madurez, tras reconocer que su relación ya no era la misma.

Fuente: El Imparcial.