Ante la falta de unidades funcionales y la nula respuesta del Gobierno Municipal, el Departamento de Bomberos de San Ignacio Río Muertos anunció que se encuentra fuera de servicio, sin capacidad para atender emergencias que pudieran presentarse en la comunidad.
A través de publicaciones en redes sociales, los elementos hicieron pública su situación. Informaron que la unidad principal extintora presenta fallas severas en el radiador y devuelve el agua al sistema, lo que imposibilita su uso. Además, la unidad de ataque rápido R10 no cuenta con reversa, mientras que la unidad 04 tiene dañada la bomba de gasolina. Estas condiciones los obligaron a suspender actividades.
El comandante retirado Alfonso Valenzuela Lerma, aún vinculado al cuerpo de bomberos ante la falta de nueva estructura, manifestó que los vehículos han estado en uso constante durante años sin mantenimiento adecuado, y que hoy simplemente no hay manera de operar.
“Estamos trabajando con tres unidades muy deterioradas. Una de ellas ya no arranca, otra no puede maniobrar en reversa y la principal se calienta y tira el agua. No tenemos elementos con nómina, no hay recursos, y no hay forma de cubrir a una población de más de 35 mil personas”, declaró.
aIndicó que han solicitado apoyo en reiteradas ocasiones al alcalde, sin obtener solución. Además, informaron que el presidente de la Asociación de Bomberos del Estado, Omar Mendoza, gestionó una audiencia que tampoco ha sido atendida por las autoridades locales.
En su llamado público, los bomberos piden la intervención urgente del Gobierno del Estado y de Protección Civil, destacando que la Ley de Protección Civil establece que los municipios son responsables de garantizar este servicio vital.
Por esta situación, anunciaron que el municipio permanece sin cobertura ante siniestros, y los voluntarios afirman haber llegado al límite de sus posibilidades operativas.
