
Richard Steven Valenzuela Reyes, conocido artísticamente como Ritchie Valens, nació el 13 de mayo de 1941 en Pacoima, California. De ascendencia mexicana, sus raíces familiares se remontan a Vícam, Sonora, y es probable que tuviera ascendencia yaqui y mayo.
Desde joven, Valens mostró un talento excepcional para la música, aprendiendo a tocar la guitarra y otros instrumentos. A los 16 años, grabó su primer éxito, “Come On, Let’s Go”, que rápidamente se convirtió en un himno del rock and roll. Sin embargo, fue su versión de “La Bamba”, una canción folclórica mexicana adaptada al rock, la que lo catapultó a la fama internacional.
En 1958, Valens lanzó “Donna”, una balada dedicada a su novia de secundaria, Donna Ludwig. La canción alcanzó el número 2 en la lista Billboard Hot 100 en 1959, consolidando su posición en la escena musical.
Trágicamente, su vida fue truncada a la edad de 17 años en un accidente aéreo el 3 de febrero de 1959, y a pesar de su corta carrera, Valens dejó un legado duradero, siendo reconocido como uno de los primeros artistas en fusionar el rock and roll con influencias latinas.
Su historia fue llevada al cine en 1987 con la película “La Bamba”, protagonizada por Lou Diamond Phillips. El filme destacó su impacto cultural y musical, y su banda sonora, interpretada por Los Lobos, revitalizó su música para nuevas generaciones.
En reconocimiento a su contribución al mundo de la música, Ritchie Valens fue incluido póstumamente en el Salón de la Fama del Rock and Roll en 2001.
Es recordado no solo por su talento y carisma, sino también por abrir caminos para artistas latinos en la industria musical estadounidense. Su legado perdura como símbolo de innovación y orgullo cultural.