‘Toño recibió una descarga eléctrica, lo vi porque yo estaba con él, pero en su acta de defunción dice que fue por ahogamiento, eso es mentira, dijo su amiga Gabriela.
Por última vez llegaron a sus hogares, los cuerpos de Ángel Daniel Cervantes y de José Antonio Pérez quienes perdieron la vida, el primero ahogado y el segundo electrocutado durante una fuerte lluvia registrada el pasado miércoles en el municipio de Chimalhuacán en el Estado de México, presuntamente por obras mal terminadas en la avenida Arca de Noé.
Hoy sus familias además de vivir el dolor de su pérdida, deben exigir se esclarezca las causas de sus muertes.
“Nos han hecho largas, una versión y otra, lo que queremos es que ya se aclare porque si esto pasó con mi hijo y el otro joven, va a seguir pasando lo mismo, ya vienen las agua y va a volver a pasar”, apuntó Soledad Vivero, mamá de Ángel Daniel.
Incluso ahora la necropsia de Antonio indica que murió de asfixia cuando inicialmente fue electrocutado, por tocar un poste de luz, cuando salió de la escuela.
“La necropsia arroja que se asfixió… no, él se electrocutó…. yo creo que está mal lo que están haciendo, por lo regular el gobierno siempre va a ser así, entonces lo único que yo les pido que pongan atención en lo que están haciendo, si van a hacer algo que lo hagan bien, para que no pasen estos casos ya, se quieren deslindar de toda responsabilidad como siempre ha pasado”, añadió María Teresa, mamá de José Antonio.
Gabriela, amiga de Toño, quien estaba con él, el día del accidente aseguró que el joven recibió una descarga eléctrica.
“Es una mentira, yo junto con mi otro amigo vimos realmente cómo pasaron los sucesos, no es cierto, es una injusticia que en su acta de defunción diga que fue por ahogamiento cuando claramente no lo fue”, sentenció.
Ahora las dos familias exigen justicia para sus hijos, quienes fueron sepultados en los panteones de la localidad.
FUENTES: EXCELSIOR.
