En Chiapas, en los últimos tres años han desaparecido unas mil personas y muchos de los casos están estrechamente vinculados a la disputa entre grupos delictivos por el control del territorio, y que las autoridades desatienden o niegan la problemática, señalaron colectivos y familiares en el Día Internacional de Víctimas de Desaparición Forzada que se manifestaron en la capital chiapaneca y en San Cristóbal de las Casas para exigir la aparición de sus seres queridos.
En San Cristóbal de las Casas se llevó a cabo una concentración que organizaron comités de búsqueda de personas y organizaciones, mientras que en la capital, familiares de víctimas de hombres y mujeres desaparecidos llevaron a cabo una caminata que culminó en la explanada del palacio de gobierno.
“En Chiapas, la violencia desbordada por la lucha de control territorial entre grupos delictivos locales y transnacionales ha alcanzado niveles alarmantes en los últimos tres años”, aseguraron en un pronunciamiento conjunto el Grupo de Trabajo contra la Desaparición en Chiapas, el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas. el Comité Familias Unidas de Chiapas Buscando a Nuestros Migrantes Desaparecidos “Junax Ko’ntantik”, Melel Xojobal. Servicios y Asesoría para la Paz (Serapaz) y Voces Mesoamericanas, Acción con Pueblos Migrantes.
Esta situación, subrayan, “ha causado muerte, desplazamiento forzado, y un constante clima de miedo y amenazas de desapariciones, reclutamiento forzado y trata.
“Ante esto, cientos de personas huyen y buscan refugio en otras comunidades, municipios o países, y frecuentemente optan por migrar. A pesar de la gravedad del problema, los gobiernos estatal y federal siguen negando y minimizando la situación, convirtiéndose en cómplices y responsables de esta violencia.”
Las organizaciones que han mostrado su solidaridad con las familias de víctimas señalan que, en la entidad, las desapariciones tienen múltiples causas y sus efectos se entrelazan con otros factores de exclusión, como empobrecimiento, violencia y falta de acceso a la justicia.
“En Chiapas, la desaparición está estrechamente vinculada a la disputa entre grupos delictivos por el control del territorio, mientras las autoridades desatienden o niegan el problema. En medio de esto, las familias chiapanecas continúan buscando a sus desaparecidos y las personas migrantes, tanto nacionales como internacionales, enfrentan riesgos al transitar por México. La desaparición se utiliza con fines de trata, reclutamiento forzado y es también una expresión de la violencia feminicida y una amenaza contra defensores de derechos humanos”.
De acuerdo con el seguimiento que llevan de los casos, entre 2018 y 2023 la Fiscalía General del Estado registró 201 carpetas de investigación, mientras que el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO) reportó 810 desapariciones en el mismo periodo.
“Solo en el primer semestre de 2024, el RNPDNO ha registrado 632 desapariciones. En el mismo año, el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas ha atendido seis casos con diez personas desaparecidas en municipios afectados por la violencia como son Bellavista, Ocosingo, Osumacinta, San Cristóbal de Las Casas y Tila”.
Además, la desaparición de migrantes, tanto nacionales como internacionales, en su tránsito por México sigue siendo preocupante. Actualmente hay mil 653 migrantes desaparecidos originarios de Chiapas, Guatemala, El Salvador y Honduras; 60 de ellos siguen sin ser localizados. Ante esta situación, las autoridades siguen sin atender las demandas de las familias organizadas. ¡No atender y dar seguimiento a las demandas de las familias es otra forma de complicidad!, denunciaron las ONG.
FUENTE: PROCESO.