Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de Brasil, destituyó al ministro de Derechos Humanos, Silvio Almeida, acusado de abusar de varias mujeres.
“El presidente considera insostenible mantener al ministro en su cargo teniendo en cuenta la naturaleza de las acusaciones de acoso sexual”, dijo la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia.
En un comunicado, la dependencia destaca que la Policía Federal abrió una investigación y que la Comisión de Ética Pública de la Presidencia también inició un procedimiento preliminar de esclarecimiento.
En un video divulgado en sus redes sociales, Almeida, activista en la defensa jurídica de los derechos de las minorías, negó las acusaciones, calificándolas de “mentiras absurdas” y sin fundamento.
Una de las mujeres que supuestamente fue acosada es la destacada ministra de Igualdad Racial, Anielle Franco, informó el medio de comunicación local Metrópoles, citando a 14 personas, incluidos funcionarios del gobierno y amigos suyos.
Franco, también activista de derechos humanos, se negó a hacer comentarios cuando se le preguntó sobre el informe. Su hermana, la exconcejal de la ciudad de Río de Janeiro Marielle Franco, fue asesinada en 2018 junto con su chófer en un caso que fue denunciado internacionalmente.
La ONG local Me Too Brasil confirmó a Reuters que recibió acusaciones de acoso sexual contra el ministro y que brindó asistencia a las mujeres implicadas. Tras solicitar la aprobación de ellas, la ONG accedió a revelar los casos, pero sin proporcionar nombres ni detalles.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva dijo más temprano que iba a reunirse con Almeida y Franco por separado.
“Quien acosa no permanece en el gobierno”, afirmó Lula en una entrevista a una radio local, añadiendo, sin embargo, que primero hay que garantizarle al ministro el derecho a defenderse.
El gobierno brasileño dijo en un comunicado que las acusaciones son graves y dijo que el caso “es tratado con el rigor y la prisa que requieren las situaciones que involucran posible violencia contra la mujer”.
Tanto Franco como Almeida han estado en el gabinete desde el comienzo del actual mandato de Lula en 2023 y son vistos en Brasil como importantes activistas de derechos humanos.
FUENTE: ARISTEGUI NOTICIAS.