El pasado viernes, un trágico accidente en un campo de paracaidismo en el sur de California cobró la vida de una instructora de paracaidismo y su estudiante.
El incidente ocurrió en Skydive Perris, un reconocido centro de paracaidismo ubicado a unas 70 millas al sureste de Los Ángeles. Ambas mujeres, Devrey LaRiccia y Kayla Black, ambas de 28 años, se encontraban realizando un salto en tándem cuando fueron atrapadas en un remolino de polvo, conocido como “dust devil”.
Devrey LaRiccia, originaria de Menifee, perdió la vida el mismo día del accidente, mientras que su estudiante, Kayla Black, falleció dos días después en el hospital.
El accidente ocurrió alrededor de las 2:30 p.m., cuando LaRiccia realizaba su último salto del día. Según Freddie Chase, pareja de LaRiccia, no hubo fallos en el equipo ni en el avión, sino que el remolino de polvo fue el causante del desastre al hacer girar el paracaídas descontroladamente, lo que provocó un impacto violento contra el suelo.
De acuerdo con los testimonios el remolino provocó que paracaídas girara descontroladamente, arrastrandolas al suelo.
Las autoridades del condado de Riverside confirmaron que ambas mujeres fueron encontradas con heridas graves y trasladadas de inmediato al hospital.
La Administración Federal de Aviación (FAA) ha sido notificada del incidente y se encuentra revisando el cumplimiento de las normativas de seguridad.
Este trágico suceso ha conmovido a la comunidad, y en respuesta, se han realizado varias recaudaciones de fondos para cubrir los gastos funerarios de las víctimas. Hasta el momento, se han recaudado casi 60 mil dólares para Devrey LaRiccia y más de 33 mil para Kayla Black.
FUENTE: Excelsior
