La comunidad de Dallas está de luto tras la trágica muerte de dos hermanas, Blair Harber, de 13 años, y Brooke Harber, de 11, quienes fallecieron durante una inundación repentina en la región de Texas Hill Country el pasado 4 de julio. La familia, que se encontraba de vacaciones en la comunidad cerrada Casa Bonita, en Hunt, Texas, fue sorprendida por la súbita crecida del río Guadalupe provocada por intensas lluvias.
Las menores se alojaban junto a sus abuelos, Mike y Charlene Harber aún desaparecidos en una casa de dos pisos. Mientras tanto, sus padres, RJ y Annie Harber, estaban en una cabaña cercana y no resultaron heridos. De acuerdo con una campaña en GoFundMe, la familia fue despertada alrededor de las 3:30 de la madrugada por el temporal, pero la velocidad con que subía el agua un pie por minuto impidió rescatar a las niñas a tiempo.
En un emotivo acto final, Brooke alcanzó a enviar un mensaje a su padre y abuelos maternos: “I love you”. Horas más tarde, los cuerpos de las hermanas fueron localizados en Kerrville, a unos 24 kilómetros del sitio del desbordamiento. Según testigos, las menores fueron encontradas tomadas de la mano y con rosarios entre los dedos.
La devastación ha sido generalizada en la zona. Solo cuatro a seis viviendas permanecen en pie de un total de veinte. La corriente arrasó el vecindario, y los esfuerzos de rescate han involucrado a la Guardia Costera, helicópteros, drones y equipos terrestres. Más de 850 personas han sido rescatadas, incluyendo 160 evacuadas por vía aérea.
El presidente Donald Trump declaró zona de desastre en el condado Kerr, facilitando la llegada de ayuda federal. Las autoridades han calificado el desastre como un “evento de víctimas masivas”: al menos 82 personas han fallecido y decenas continúan desaparecidas.
Entre los muertos también se encuentra Richard Eastland, director del campamento local, así como varios de sus asistentes.
La búsqueda de los abuelos de Blair y Brooke continúa este fin de semana con la esperanza de ofrecer a la familia respuestas y cerrar un capítulo marcado por la tragedia.
